Entre nuestro pueblo debe haber un despertar acerca de este asunto. Son sólo pocos los hombres que sienten remordimiento de conciencia si descuidan su deber en cuanto a la beneficencia. Muy pocos sienten remordimiento de alma por robar diariamente a Dios. CMC 332.3
Si un cristiano, deliberada o accidentalmente, paga a su vecino menos de lo que le debe o se niega a cancelar una deuda honorable, su conciencia le perturbará, a menos que esté cauterizada; no puede descansar aun cuando nadie sepa del asunto sino él. Hay muchos votos descuidados y promesas que no han sido pagadas, y sin embargo, cuán pocos afligen sus ánimos acerca del asunto; cuán pocos sienten la culpabilidad de esta violación de sus deberes. CMC 332.4
Debemos sentir nuevas y más profundas convicciones al respecto. La conciencia debe ser despertada, y el asunto debe recibir sincera atención, porque habrá que dar cuenta de ello a Dios en el último día, y sus exigencias han de ser cumplidas.—Joyas de los Testimonios 1:257, 258. CMC 333.1