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La madre que amamanta ha de mantenerse feliz 1MCP 175

El carácter del niño también es más o menos afectado por la naturaleza del alimento que recibe de su madre. Cuán importante es, entonces, que la madre, mientras amamanta a su bebé, conserve un estado mental de felicidad, con un control perfecto sobre su propio espíritu. Porque al hacer esto, el alimento del niño no es dañado, y la forma serena y confiada en que la madre trata a su hijo tiene mucho que ver en la formación de la mente del niño. Si está nervioso y se inquieta fácilmente, la conducta cuidadosa y serena de la madre tendrá una influencia correctiva y tranquilizadora, y mejorará mucho la salud del bebé.—The Review and Herald, 25 de julio de 1899. 1MCP 175.1