Go to full page →

Cómo rechazar la sombra de la duda 2MCP 317

Cuando Satanás tiende su sombra infernal sobre mi senda, no la miro ni hablo de ella, ni glorifico al diablo hablando de él y de su poder, y de los momentos difíciles que me ha hecho pasar. No, atravieso la sombra, y por fe me aferro de Jesucristo. Al contemplarlo somos “transformados de gloria en gloria en su misma semejanza”. 2 Corintios 3:18. Hablen acerca de la fe. Cada duda que manifiestan es una semilla que se siembra, y esa semilla echará raíces en algún corazón. No querramos pronunciar una sola palabra de duda para alabar así al diablo por el gran poder que ha ejercido con el fin de mantenernos en sujeción. No; Cristo me ha adquirido y me ha redimido. Satanás no tiene poder sobre mí.—Manuscrito 16, 1894. 2MCP 317.1