Basilea está ubicada al norte de Suiza, cerca de las fronteras de Alemania y Francia. Al igual que en Zurich y Berna, allí se habla el alemán. La región es menos montañosa que la parte central de Suiza. Esta ciudad histórica, ubicada en un lugar tan estratégico, fue elegida como asiento de la sede adventista en Europa Central. Allí se estableció la primera institución de la iglesia en Europa. Cuando se anunció que allí se celebraría el tercer concilio europeo, el cual sería precedido por una reunión de cuatro días de la Asociación Suiza, Elena G. de White se apresuró a cruzar el Atlántico para estar presente en esas reuniones. EGWE 53.1
En la estación del ferrocarril en Basilea la esperaba B. L. Whitney, que fue a Europa en 1883 para hacerse cargo de la obra que dejó J. N. Andrews.*El activo hermano Andrews falleció en medio de sus labores en 1883 a la edad de 54 años. Está sepultado en Basilea. Dio su vida, literalmente, por la causa que empezaba a desarrollarse en Europa. Tuvo una amplia influencia. J. N. Loughborough, uno de los pioneros de la obra en Inglaterra, se convirtió por la predicación del pastor Andrews en Rochester, Nueva York, en 1852. El joven Carlos M. Andrews, hijo de J. N., estaba también allí con uno de los hermanos Vuilleumier. EGWE 53.2
Se dirigieron en un coche a caballo hasta el edificio recién terminado de las oficinas y la casa editora, donde aguardaban otros antiguos amigos para saludarlos. Allí estaba A. C. Bourdeau, que había llegado hacía un año. También estaban la anciana madre de J. N. Andrews, Sarah L. Andrews; la esposa de A. C. Bourdeau, Martha *Martha Bourdeau fue un Interesante personaje que unió a tres prominentes familias. Su nombre de soltera era Martha A. Butler, y fue la hermana menor de Jorge I. Butler. Se casó en primeras nupcias con Guillermo Andrews, hermano de J. N. Andrews, con quien tuvo tres hijos, entre ellos Edith Andrews que falleció al poco tiempo de tuberculosis. Y finalmente, después que Bourdeau llegó a Europa en 1844, se casó con Martha, que había enviudado, y ambos trabajaron en Italia.; Bertha Stein y Anna Rasmussen. Las dos últimas habían cruzado el Atlántico con Elena G. de White, pero fueron directamente a Basilea en lugar de quedarse con ella en Inglaterra. EGWE 53.3