Loading...
Larger font
Smaller font
Copy
Print
Contents
Hijos e Hijas de Dios - Contents
  • Results
  • Related
  • Featured
No results found for: "".
  • Weighted Relevancy
  • Content Sequence
  • Relevancy
  • Earliest First
  • Latest First
    Larger font
    Smaller font
    Copy
    Print
    Contents

    Entre el cielo y la Tierra, 31 de enero

    Y soñó: y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, y su extremo tocaba en el cielo; y he aquí ángeles de Dios que subían y descendían por ella. Génesis 28:12.HHD 39.1

    El universo celestial manifiesta el mayor interés por este puntito perdido del mundo... No obstante, cuando nos ponemos en contacto con la actividad incesante de nuestras ciudades, cuando nos mezclamos con las multitudes en nuestras populosas avenidas, cuando entramos en los mercados y caminamos por las calles; en todos esos lugares, de la mañana a la noche, la gente obra como si los negocios, los deportes y los placeres fueran el todo de la vida, como si fueran lo único que debe ocupar la mente. ¡Cuán poco consideran a los instrumentos invisibles!HHD 39.2

    Todo el cielo está profundamente interesado en los seres humanos que están tan llenos de actividades, y que no tienen pensamientos para lo invisible... A veces las inteligencias celestiales descorren el velo que oculta el mundo invisible, con el fin de que nuestra mente pueda ser desviada del apresuramiento y la ansiedad, considere que hay testigos para todo lo que hacemos y decimos, tanto cuando estamos dedicados a nuestros negocios, como cuando nos encontramos solos...HHD 39.3

    Estos seres celestiales son ángeles ministradores que frecuentemente se nos aparecen en forma de seres humanos, y como extraños conversan con los que están dedicados a la obra de Dios. Han sido los compañeros del viajero en peligro en lugares solitarios. En los barcos sacudidos por la tempestad han dirigido palabras que han disipado el temor y han inspirado esperanza en la hora de peligro. Muchos bajo distintas circunstancias, han escuchado voces de habitantes de otros mundos.—The Review and Herald, 22 de noviembre de 1898.HHD 39.4

    Larger font
    Smaller font
    Copy
    Print
    Contents