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Testimonios para la Iglesia, Tomo 1 - Contents
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    Tiempos peligrosos

    El mundo incrédulo pronto tendrá algo en que pensar fuera de sus vestidos y apariencia; y cuando sus mentes sean arrancadas de estas cosas por los problemas y la confusión, ellos no tendrán nada de qué aferrarse. No son prisioneros de la esperanza de modo que no pueden volverse al Baluarte. Desfallecerán a causa de los sobresaltos y del temor. No han hecho de Dios su refugio y él no será su consuelo en el momento de necesidad, en cambio se reirá de su calamidad y se burlará cuando les venga el temor. Han despreciado y pisoteado las verdades de la Palabra de Dios. Se han complacido llevando vestidos extravagantes y han gastado sus vidas en fiestas y francachelas. Sembraron viento y cosecharán tempestad. En el tiempo cuando las naciones sean sobrecogidas por grandes dificultades y confusión habrá muchos que no se han entregado completamente a las influencias corruptoras del mundo y el servicio de Satanás, quienes se humillarán delante de Dios y se volverán hacia él de todo corazón y encontrarán aceptación y perdón.1TPI 243.3

    Aquellos entre los observadores del sábado que no han estado dispuestos a hacer sacrificios, pero han cedido a las influencias del mundo, llegarán a ser probados. Los peligros de los últimos días están sobre nosotros y para los jóvenes se avecina una prueba que no habían anticipado. Se verán frente a dificultades sumamente graves. Será probada la autenticidad de su fe. Profesan estar esperando la venida del Hijo del hombre, y sin embargo algunos de ellos han sido un pésimo ejemplo para los incrédulos. No han estado dispuestos a abandonar el mundo sino que se han unido con él, han asistido a picnics objetables y a otras reuniones de placer, y se han complacido a sí mismos diciéndose que se dedicaban a entretenimientos inocentes. Sin embargo, se me mostró que son precisamente esas complacencias las que los separan de Dios y los convierten en hijos del mundo. Dios no considera a los buscadores de placeres como sus seguidores. El no nos ha dado tal ejemplo. Únicamente los que se niegan a sí mismos, y que llevan una vida de sobriedad, humildad y santidad son los verdaderos seguidores de Jesús; y los tales no pueden dedicarse a las conversaciones frívolas e insensatas de los amadores del mundo, y tampoco pueden disfrutar de ellas.1TPI 244.1

    Tenemos ante nosotros un día de amarga angustia. Se me mostró que era necesario dar testimonios definidos, y que los que se adelantaran a prestar ayuda al Señor recibirían su bendición. Los observadores del sábado tienen una obra que deben hacer. Se me mostró que los vestidos provistos de aros de alambre eran una abominación y que la influencia de todos los observadores del sábado debía reprobar esta moda ridícula, que ha sido una pantalla de iniquidad y que surgió en una casa de mala fama de París. Me fueron mostradas algunas personas que rechazarían la instrucción, aunque ésta procediera del cielo; urdirán excusas para evitar el testimonio más definido, y desafiando toda luz usarán los aros en los vestidos porque es la moda, y correrán el riesgo de las consecuencias.1TPI 244.2

    Se me presentó la profecía de Isaías 3 aplicada a estos últimos días, y los reproches se dan a las hijas de Sión que piensan únicamente en las apariencias y en el exhibicionismo. Leed el versículo 25: “Tus varones caerán a espada, y tu fuerza en la guerra”. Se me mostró que este pasaje se cumpliría estrictamente. Serán probados los jóvenes de ambos sexos que profesan ser cristianos, y que sin embargo no han manifestado una experiencia cristiana, no han soportado ninguna carga y no han sentido responsabilidad individual. Se verán rebajados hasta el polvo y anhelarán tener una experiencia en las cosas de Dios, que dejaron de obtener.1TPI 244.3

    La guerra se ciñe el casco de batalla;
    oh, Dios, protege ahora a tu pueblo.
    1TPI 245.1

    *****

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