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Consejos Sobre el Régimen Alimenticio - Contents
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    Sección 3—La reforma pro salud y el mensaje del tercer ángel

    Como la mano para el cuerpo

    97. El 10 de diciembre de 1871 me fue mostrado nuevamente que la reforma pro salud es un ramo de la gran obra que ha de preparar a un pueblo para la venida del Señor. Está tan íntimamente relacionada con el mensaje del tercer ángel como la mano lo está con el cuerpo. La ley de los Diez Mandamientos ha sido considerada livianamente por los hombres, pero el Señor no quiso venir a castigar a los transgresores de dicha ley sin mandarles primero un mensaje de amonestación. El tercer ángel proclama ese mensaje. Si los hombres hubieran sido siempre obedientes al Decálogo, y hubiesen llevado a cabo en su vida los principios de esos preceptos, la maldición de tanta enfermedad que ahora inunda al mundo no existiría.—Joyas de los Testimonios 1:319, 320 (1873).CRA 81.1

    Para preparar a un pueblo

    Los hombres y las mujeres no pueden violar la ley natural, complaciendo un apetito depravado y pasiones concupiscentes, sin violar la ley de Dios. Por lo tanto, el Señor ha permitido que sobre nosotros resplandezca la luz de la reforma pro salud, para que veamos el pecado que cometemos al violar las leyes que él estableció en nuestro ser. Todos nuestros goces o sufrimientos pueden atribuirse a la obediencia o transgresión de la ley natural.CRA 81.2

    Nuestro misericordioso Padre celestial ve la condición deplorable de los hombres que, a sabiendas unos, por ignorancia muchos, viven violando las leyes que él estableció. Pero por su amor y compasión hacia la humanidad, él hace resplandecer la luz de la reforma pro salud. Promulga su ley y anuncia la penalidad que se aplicará a la transgresión de ella, para que todos puedan aprender y procuren vivir en armonía con la ley natural. Proclama su ley tan distintamente y la hace tan eminente que es como una ciudad asentada sobre una montaña. Todos los seres responsables pueden comprenderla si quieren. Los idiotas no serán responsables. Hacer clara la ley natural e instar a que se la obedezca es la obra que acompaña al mensaje del tercer ángel, con el propósito de preparar a un pueblo para la venida del Señor.CRA 81.3

    La derrota de Adán—La victoria de Cristo

    Adán y Eva cayeron por el apetito intemperante. Cristo vino y soportó las más duras tentaciones de Satanás, y en favor de la raza, venció el apetito, mostrando que el hombre puede vencer. Así como Adán cayó en el apetito, y perdió la bendición del Edén, los hijos de Adán pueden, por medio de Cristo, vencer el apetito, y por la temperancia en todas las cosas volver a conquistar el Edén.—Testimonies for the Church 3:161, 162 (1873).CRA 82.1

    Ayudas para discernir la verdad

    La ignorancia no es ahora una excusa de la transgresión de la ley. La luz brilla claramente, y nadie necesita ser ignorante, porque el gran Dios es, él mismo, el instructor del hombre. Todos tienen la más sagrada obligación ante Dios de prestar oídos a la sana filosofía y la experiencia auténtica que ahora él les está dando con referencia a la reforma pro salud. El Señor se propone que el gran tema de la reforma pro salud sea agitado, y la mente pública profundamente sacudida para investigar; pues es imposible que los hombres y mujeres, con todos sus hábitos pecaminosos, destructores de la salud y debilitantes del cerebro, disciernan la sagrada verdad por medio de la cual han de ser santificados, refinados, elevados y hechos idóneos para la asociación con los ángeles celestiales en el reino de gloria...CRA 82.2

    Santificados o castigados

    El apóstol Pablo exhorta a la iglesia: “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional”. Romanos 12:1. Los hombres, pues, pueden profanar sus cuerpos por medio de complacencias pecaminosas. Si no son santos, no son idóneos para ser adoradores espirituales, ni son dignos del cielo. Si el hombre aprecia la luz que Dios en su misericordia le da sobre la reforma pro salud, puede ser santificado por medio de la verdad, y hecho idóneo para la inmortalidad. Pero si desatiende esa luz, y vive en violación de la ley natural, debe pagar la penalidad.CRA 83.1

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