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Testimonios para la Iglesia, Tomo 6 - Contents
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    La obra para este tiempo

    Estamos en el umbral de grandes y solemnes acontecimientos. Las profecías se están cumpliendo. Una historia extraordinaria y memorable se está registrando en los libros del cielo. Todo en nuestro mundo está en agitación. Hay guerras y rumores de guerra. Las naciones están airadas y ha llegado el tiempo en que deben ser juzgados los muertos. Los acontecimientos están cambiando para no demorar la llegada del día de Dios, que se vendrá prestamente. Queda, por así decirlo, solamente un poco de tiempo. Pero aunque ya se levanta nación contra nación, y reino contra reino, no existe todavía una conflagración general. Los cuatro vientos serán retenidos hasta que los siervos de Dios sean sellados en sus frentes. Entonces las potencias de la tierra dispondrán sus fuerzas para la última gran batalla.6TPI 23.1

    Satanás está ocupado diligentemente en la preparación de sus planes para el postrer gran conflicto, cuando todos definirán sus posiciones. Después de haber sido proclamado el Evangelio en el mundo por casi dos mil años, Satanás todavía presenta a los hombres y mujeres el mismo cuadro que le presentó a Cristo. En forma prodigiosa, despliega ante ellos la gloria de los reinos de este mundo y se la promete a todos los que acepten postrarse ante él y adorarlo. Así trata de colocar a los seres humanos bajo su dominio. 6TPI 23.2

    *****

    Satanás hace denodados esfuerzos para presentarse como Dios, y para destruir a todos los que se oponen a su poder. Hoy el mundo entero se está sometiendo a él. Se acepta su poder como si fuera el poder de Dios. Se está cumpliendo la profecía del Apocalipsis, de que “se maravilló toda la tierra en pos de la bestia”. Apocalipsis 13:3.6TPI 23.3

    En su ceguera, los seres humanos se jactan de haber alcanzado extraordinarios progresos y asombrosos conocimientos; pero su culpabilidad íntima y depravación son manifiestas para el ojo de la Omnisciencia. Los guardianes celestiales ven la tierra llena de violencia y crimen. Se obtienen riquezas mediante toda suerte de robos, no sólo a los hombres sino también a Dios. La gente emplea los recursos divinos para satisfacer su egoísmo; usa todo lo que puedan obtener para servir a su codicia. La avaricia y la sensualidad prevalecen, y se valoran positivamente los atributos del primer engañador. Lo han aceptado como dios y están imbuidos de su espíritu.6TPI 23.4

    Pero la nube de la ira justiciera los cubre y encierra los elementos que destruyeron a Sodoma. En las visiones de las cosas venideras, el profeta Juan contempló esta escena. Le fue revelada esta adoración del demonio y le pareció que todo el mundo se encontraba al borde de la perdición. Pero mientras miraba con profundo interés, contempló el pueblo que guarda los mandamientos de Dios. Todos tenían sobre la frente el sello del Dios vivo, y dijo: “Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios, y la fe de Jesús. Oí una voz que desde cielo me decía: Escribe: Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen. Miré, y he aquí una nube blanca; y sobre la nube uno sentado semejante al Hijo del hombre, que tenía en la cabeza una corona de oro, y en la mano una hoz aguda. Y del templo salió otro ángel, clamando a gran voz al que estaba sentado sobre la nube: Mete tu hoz, y siega; porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura. Y el que estaba sentado sobre la nube metió su hoz en la tierra, y la tierra fue segada. Salió otro ángel del templo que está en el cielo, teniendo también una hoz aguda. Y salió del altar otro ángel, que tenía poder sobre el fuego, y llamó a gran voz al que tenía la hoz aguda, diciendo: Mete tu hoz aguda, y vendimia los racimos de la tierra, porque sus uvas están maduras. Y el ángel arrojó su hoz en la tierra, y vendimió la viña de la tierra, y echó las uvas en el gran lagar de la ira de Dios”. Apocalipsis 14:12-19.6TPI 24.1

    Cuando la tempestad de la ira de Dios estalle sobre el mundo, constituirá una terrible revelación para muchos descubrir que su casa ha sido arrasada, porque la habían edificado sobre la arena. Es necesario que los amonestemos antes que sea demasiado tarde. Debiéramos sentir ahora la responsabilidad de trabajar con intenso fervor en impartir a otros las verdades que Dios ha dado para este tiempo. Nunca nos excederemos en nuestro fervor.6TPI 25.1

    El corazón de Dios está conmovido. Las almas son muy preciosas a su vista. Cristo lloró en agonía por este mundo; fue crucificado por él. Dios entregó a su Hijo unigénito para salvar a los pecadores, y desea que amemos a los demás como él nos amó. Desea ver que quienes tienen el conocimiento de la verdad lo impartan a sus semejantes.6TPI 25.2

    Ahora es cuando tenemos que presentar la última amonestación. La presentación de la verdad en estos momentos va acompañada por un poder especial. Pero, ¿cuánto tiempo durará esto? Tan sólo un poquito. Si alguna vez hubo una crisis es ahora.6TPI 25.3

    Todos están decidiendo hoy su destino eterno. Es necesario despertar a la humanidad para que comprenda la solemnidad del momento, la proximidad del día cuando terminará el tiempo de gracia para los seres humanos. Deben hacerse esfuerzos definidos para presentar a la gente en forma impactante el mensaje para este tiempo. El tercer ángel ha de avanzar con gran poder. Que nadie ignore esta obra, ni la trate como si tuviera poca importancia.6TPI 25.4

    La luz que hemos recibido acerca del mensaje del tercer ángel es la luz verdadera. La marca de la bestia es exactamente lo que ha sido proclamado. No se comprende todavía todo lo referente a este asunto, ni se comprenderá hasta que se abra el rollo; pero se ha de realizar una obra muy solemne en nuestro mundo. La orden del Señor a sus siervos es: “Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado”. Isaías 58:1.6TPI 25.5

    No debe haber cambio en los rasgos generales de nuestra obra. Ha de permanecer tan clara y distinta como la profecía la ha hecho. No podemos entrar en ninguna alianza con el mundo suponiendo que al hacerlo podríamos lograr más. Si alguien obstaculiza el camino para impedir el progreso de la obra en los ramos que Dios ha establecido, desagradará a Dios. Es preciso no debilitar ningún aspecto de la verdad que ha hecho al pueblo adventista del séptimo día lo que es. Tenemos los antiguos hitos de la verdad, la experiencia y el deber, y debemos permanecer firmes en la defensa de nuestros principios ante del mundo.6TPI 26.1

    Es esencial que surjan hombres que abran los oráculos vivientes de Dios a todos los pueblos. Hombres de todos los niveles y aptitudes, con sus variados dones, han de cooperar armoniosamente para obtener un resultado común; han de unirse en la obra de presentar la verdad a la gente, cumpliendo cada obrero su propia tarea. 6TPI 26.2

    *****

    Los tres ángeles de (Apocalipsis 14), que aparecen volando por en medio del cielo, simbolizan la obra de los que proclaman los mensajes del primer, segundo y tercer ángel. Están unidos. Las evidencias de la verdad permanente y viva de estos grandes mensajes, que tanto significan para la iglesia, y que han despertado tan intensa oposición de parte del mundo religioso, no han perdido vigencia. Satanás trata constantemente de arrojar sombra alrededor de estos mensajes, para que el pueblo de Dios no discierna claramente su significado, su momento y lugar; pero esos mensajes viven y han de ejercer su poder sobre nuestra experiencia religiosa mientras dure el tiempo.6TPI 26.3

    La influencia de estos mensajes se ha estado profundizando y ensanchando, ha puesto en movimiento los resortes de la acción en millares de corazones, ha levantado instituciones de saber, editoriales y sanatorios: todos ellos instrumentos de Dios para cooperar en la gran obra representada por el primero, el segundo y el tercer ángel. Esta obra consiste en advertir a los habitantes del mundo que Cristo viene por segunda vez, con poder y grande gloria. 6TPI 26.4

    *****

    Hermanos y hermanas, ¡ojalá pudiera decir algo que os despertara y os hiciese ver la importancia del momento presente, el significado de los acontecimientos actuales! Os señalo los movimientos agresivos que se están produciendo para restringir la libertad religiosa. El monumento recordativo y santificado por Dios ha sido derribado, y en su lugar se destaca ante el mundo un día de reposo falso que no tiene santidad. Mientras las potestades de las tinieblas están agitando los elementos desde abajo, el Señor del cielo envía poder de lo alto para hacer frente a la emergencia, animando a sus agentes vivos para que exalten la ley divina. Ahora, ahora mismo, es el momento cuando debemos trabajar en los países extranjeros. Cuando los Estados Unidos, el país de la libertad religiosa, se una con el papado para forzar la conciencia y obligar a los hombres a honrar el falso día de reposo, los habitantes de todo país del globo serán inducidos a seguir su ejemplo. Nuestros hermanos no llegan a estar ni tan sólo medio despiertos para hacer todo lo que pueden con las facilidades de que disponen, para proclamar el mensaje de amonestación.6TPI 27.1

    El Dios del cielo no enviará al mundo sus juicios motivados por la desobediencia y la transgresión antes de haber enviado a sus atalayas para que den su amonestación. No se cerrará el tiempo de gracia hasta que el mensaje haya sido proclamado con toda claridad. La ley de Dios será magnificada. Sus requerimientos se presentarán en su verdadero carácter sagrado, para que la gente se vea obligada a decidir en pro o en contra de la verdad. Sin embargo, la obra será abreviada en justicia. El mensaje de la justicia de Cristo resonará de un extremo de la tierra hasta el otro para preparar el camino del Señor. La gloria de Dios es la que termina la obra del tercer ángel. 6TPI 27.2

    *****

    No hay en nuestro mundo otra obra tan grande, sagrada y gloriosa, ninguna que Dios honre tanto, como la obra de la predicación evangélica. El mensaje presentado en este tiempo es el último mensaje de misericordia para un mundo caído. Los que tienen el privilegio de oír y persisten en negarse a escuchar la amonestación, desechan su última esperanza de salvación. No habrá un segundo tiempo de gracia.6TPI 28.1

    La palabra de verdad: “Escrito está”, es el Evangelio que hemos de predicar. No hay espada flamígera puesta delante de este árbol de vida. Todos los que quieran pueden participar de él. No hay poder capaz de impedir a alguna alma tomar de sus frutos. Todos pueden comer y vivir para siempre. 6TPI 28.2

    *****

    En los mensajes de Dios al mundo, la iglesia remanente acopiará misterios que los ángeles desearían escudriñar, que los profetas, reyes y justos desearon comprender. Los profetas predijeron estas cosas y anhelaron comprender lo que predecían; pero no se les concedió este privilegio. Anhelaban ver lo que vemos, y oír lo que oímos; pero no les fue concedido. Lo sabrán todo cuando Cristo venga por segunda vez; cuando, rodeado por una multitud que nadie puede contar, explique acerca de la liberación realizada por su gran sacrificio. 6TPI 28.3

    *****

    Algunos han presentado las verdades del mensaje del tercer ángel como teorías áridas; pero el Cristo viviente es el tema que debe presentarse en este mensaje. Debe revelarse como el primero y el último, como el Yo Soy, raíz y vástago de David y estrella resplandeciente de la mañana. El carácter de Dios en Cristo debe manifestarse al mundo mediante este mensaje. Debe proclamarse la invitación: “Súbete sobre un monte alto, anunciadora de Sión; levanta fuertemente tu voz, anunciadora de Jerusalén; levántala, no temas; di a las ciudades de Judá: ¡Ved aquí al Dios vuestro! He aquí que Jehová el Señor vendrá con poder, y su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con él, y su paga delante de su rostro. Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas” Isaías 40:9-11.6TPI 28.4

    Con Juan el Bautista debemos ahora guiar a las gentes hacia Jesús, diciendo: “He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo”. Juan 1:29. Ahora, como nunca antes, debe anunciarse la invitación: “Si alguno tiene sed, venga a mi y beba” y “el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente” Juan 7:37; Apocalipsis 22:17.6TPI 29.1

    Hay una gran obra que realizar y debe hacerse todo esfuerzo posible para revelar a Cristo como el Salvador que perdona; a Cristo como expiación por el pecado; a Cristo como la estrella de la mañana; y el Señor nos dará gracia ante el mundo hasta que se haya terminado la obra. 6TPI 29.2

    *****

    Mientras los ángeles retienen los cuatro vientos, debemos trabajar con toda nuestra capacidad. Debemos entregar nuestro mensaje sin demora. Debemos dar al universo celestial y a los hombres y mujeres de esta época degenerada, evidencia de que nuestra religión es una fe y un poder de los cuales Cristo es el autor; y que su Palabra es el oráculo divino. Hay personas que están en la balanza. Serán súbditos del reino de Dios o esclavos del despotismo de Satanás. Todos deben tener el privilegio de aceptar la esperanza que el Evangelio les ofrece; pero ¿cómo podrán oír sin que haya quien les predique? La familia humana necesita una renovación moral, una transformación del carácter, a fin de poder subsistir en la presencia de Dios. Hay almas a punto de perecer a causa de los errores de las teorías prevalecientes que han surgido contrarrestar el mensaje del Evangelio. ¿Quiénes querrán consagrarse ahora plenamente a la obra de ser colaboradores de Dios?6TPI 29.3

    Mientras veis los peligros y la miseria del mundo por obra de Satanás, no agotéis en ociosas lamentaciones las energías que Dios os ha dado, sino antes trabajad para beneficio de vosotros mismos y de los demás. Despertad y preocupaos por los que perecen. Si no son ganados para Cristo, perderán una eternidad de bienaventuranza. Pensad en lo que les es posible ganar. El alma que Dios creó y que Cristo redimió es de gran valor en virtud de las posibilidades que tiene, de las ventajas espirituales que le han sido concedidas, de las capacidades que puede poseer si la Palabra de Dios la vivifica, y de la inmortalidad que puede obtener mediante el Dador de la vida, si es obediente. Un alma es de más valor para el cielo que todo un mundo de propiedades, casas, tierras y dinero. Debiéramos emplear nuestros recursos hasta lo sumo para la conversión de un alma. Un alma ganada para Cristo reflejará en derredor suyo la luz del cielo, la cual, al penetrar en las tinieblas morales y disiparlas, salvará a otras personas.6TPI 30.1

    Si Cristo dejó las noventa y nueve para buscar y salvar a la oveja perdida, ¿podremos nosotros considerarnos exentos de responsabilidad haciendo menos? ¿Dejar de trabajar como Cristo trabajó, de sacrificarse como él se sacrificó, no es traicionar de hecho nuestro sagrado deber, y una afrenta a Dios?6TPI 30.2

    Haced resonar la alarma a lo largo y ancho de toda la tierra. Decid a la gente que el día del Señor está cerca, y que se apresura grandemente. Que no quede nadie sin ser amonestado. Podríamos estar en el lugar de las pobres almas que yerran. Podríamos haber sido colocados entre los bárbaros. De acuerdo con la verdad que hemos recibido en mayor medida que los demás, tenemos una deuda para compartirla con ellos.6TPI 30.3

    No hay tiempo que perder. El fin está cerca. Los viajes de un lugar a otro para difundir la verdad pronto se verán rodeados de peligros a diestra y siniestra. Aparecerán toda clase de obstáculos en el camino de los mensajeros del Señor, para que no puedan llevar a cabo lo que les es posible hacer ahora. Debemos mirar bien de frente nuestra obra y avanzar tan rápidamente como sea posible en una guerra agresiva. Por la luz que Dios me ha dado, sé que las potestades de las tinieblas están obrando con intensa energía desde abajo, y con paso furtivo Satanás está avanzando para sorprender a los que duermen, como un lobo que se apodera de su presa. Tenemos amonestaciones que podemos presentar ahora y una obra que podemos hacer; pero será más difícil de realizarla antes de lo que imaginamos. Que Dios nos ayude a mantenernos donde brilla la luz, a trabajar con nuestros ojos fijos en Jesús nuestro caudillo, y a avanzar con paciencia y perseverancia hasta alcanzar la victoria.6TPI 30.4

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